Te debo la cordura
De todos estos años contigo y sin ti
De los silencios que supiste aderezar
Con besos y algún TEQUIERO por ahí...
Tu piel clara en la oscuridad
Era mi Luna próxima
En todas sus variantes
De madrugada
Y desde entonces
Ya no es la misma sombra
Ni la voz perfumada
En la penumbra
Que siempre preguntaba
Por tus pasos
En tu presencia ausente
Al final del todo
Y los orgasmos
Del beso inclinado
A tu pecho
Como orándote
Adorando el último instante
En lo hondo de tu seno
Tu sexo exangüe
Y mi extremo
Todavía buscándote…