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lunes, 21 de septiembre de 2009

PENTAGRAMAS


Es tu blanca piel

Una hermosa partitura

Que leo sin saber

Siendo neófito en música.

Es por intuición,

Instinto que me dicta

Al besarte con locura

Percibiendo tu aroma

de Hembra,

de Mujer.

Tu bella voz me encanta

Cuando deliras

Cuando gimes

Palabras mías siguen

En espontáneas rimas.

Hundiéndome en tu boca

Cierras tú los ojos

Me pierdo en pentagramas

Pero el coro continúa

De cada lectura

En tus rodillas

En tus muslos

En tu vientre

Empiezan melodías

Si entran ya mis manos

Pulsando cuerdas de tu pelo

Finos vellos

Soy entonces

Director de orquesta

Soy músico, poeta

Escultor

Enredado en cuatro cuerdas

Fabricando vientos en tus bocas

Extraviando percusiones

Improvisando

Siempre improvisando…



Gabriel Cordears


6 comentarios:

Anónimo dijo...

hola Gabriel,
Será muy dichosa y feliz la compañera de tu vida que sepa apreciar la profundidad y ternura de esos versos tan hermosos...


Campanita te saluda con cariño.

Gabriel Cordears dijo...

Somos dichosos por los momentos que pasamos. Los escritos solo dan cuenta de aquellas vivencias y lo que significan realmente en lo de cada uno. Así, cada encuentro es un poema nuevo, por tanto, nuestras palabras no se las lleva el viento si no quedan plasmadas aquí o en la memoria como un poema en germen, o tal vez como en este caso, una improvisada melodía.

Gracias Campanita, con cariño
te saludo, un abrazo.

Fio dijo...

Serían las flautas en rítmicos gemidos

de tambores al debatirse entre caricias,

en el mágico exterior la música elegida

dulcifica la danza, siendo ya el epilogo

que ilustrará los coros de nuestra sinfonía

Hola Gabriel la visita ameritaba que dejará un pedacito de mi delirio por aqui, un abracito y mis humildes felicitaciones estimado poeta.

Gabriel Cordears dijo...

Gracias Fiorella. No perdería ningún pretexto para leer u oír esos bellos delirios tuyos.
Un abrazo

Flor dijo...

Uhyyyy muero cuando te leo es tan fuerte y más si uno siente tanto amor por alguien y le despierta todo eso y más y más hasta no acabar!
Besitos hermoso como siempre!

Gabriel Cordears dijo...

Solo el amor nos conduce por dulces caminos y no hay final sino la felicidad plena.

Un beso